Carta de la SEP a mi columna en MILENIO del 29 de noviembre

Estimados tecnoempresarios:

Creo que debo escribir aquí con mayor regularidad pues siendo sincero pero agradecido, el espacio que tengo en MILENIO ya me queda corto y a veces no me gusta comprometer a esa empresa por todos los choros y mafufadas que escribo. Es por eso que hoy adelanto mi firme propósito de año nuevo (2018) el cual consiste en usar de manera más recurrente esta modesta tribuna cibernética.

Todo esto sucede porque hoy me encontré muy temprano con un correo electrónico de parte del LIC. EDUARDO GUTIÉRREZ CAMPOS, DIRECTOR GENERAL DE COMUNICACIÓN SOCIAL, de la Secretaría de Educación Pública, quién envía una CARTA a don Carlos Marín, Director General Editorial de Grupo Milenio. Vale aclarar que el Lic. Eduardo Gutiérrez nunca me ha enviado (directamente a mí) ninguna carta aclaratoria pues todas las que ha enviado las dirige al señor Marín. Tal vez no me considera digno de su atención o cree que Don Carlos me va a regañar. No sé.

El asunto es que en su CARTA, el vocero de la SEP se refiere a mi columna del 29 de noviembre de 2017, en la cual dice que este rollero (o sea, yo) “nuevamente formula afirmaciones indebidas e insinuaciones suspicaces, en esta ocasión referidas al fallo relacionado con el procedimiento de licitación pública nacional electrónica No. LA-011000999-E117-2017 para el fortalecimiento del SIGED, (y que) es inevitable e indispensable refutarlas en beneficio del lector y de la verdad pura y dura”.

No te reproduzco todo el choro que me avienta en 5 puntos y 2755 caracteres, pues en ellos detalla y confirma los puntos de la licitación que a grandes rasgos yo te conté el miércoles y por eso te sugiero, mejor LEE (no “le”) la CARTA. Es hasta el punto 6 donde se pone bueno el debate pues allí afirma que “fue un proceso impecable desde el punto de vista normativo, administrativo y técnico, y miente quien afirme lo contrario”. ¿Quién será el que miente? ¿Quién afirmó lo contrario? Yo recuerdo que hasta felicité a Deloitte por haber ganado. Si no me crees, te dejo mi columna en MILENIO y en TECNOEMPRESA.

En el punto 7, el Lic. Guitiérrez dice que “tal como lo prevé la normatividad, si el señor González o las empresas con las que él esté eventualmente relacionado y tengan algún interés en este asunto tienen pruebas legalmente válidas y las puede documentar de manera fehaciente, se le invita a que las exhiba ante las autoridades competentes”.

Aquí hago un paréntesis tratando de contener una sonrisa pícara en mi cara pues si el Lic. Gutiérrez supone que estoy relacionado algunas empresas, le confirmo que sí, que estoy relacionado con muchas empresas pero ninguna de ellas me pasa los chismes, me contrata para madrear a la SEP o me dice qué escribir. Efectivamente, se trata de personas que se sienten afectadas por los fallos de la SEP en materia de tecnologías de información pero que afortunadamente no conozco. Para mi es una especie de vacuna no conocer a las personas que de manera individual, no como empresa; me dan tips de cómo se están realizando las licitaciones. Sé que muchos de ellos están ardidos y que respiran por la herida, pero también estoy seguro que tienen conocimiento de las cosas raras que se ven en los concursos y por eso yo sigo sus pistas tratando de encontrar explicaciones lógicas a esas rarezas. Lamentablemente, la política de comunicación social de la SEP no permite tener trato directo con los directivos responsables de las licitaciones que me interesan y por eso, lo reconozco; tal vez a veces (o siempre) escribo puras mamadas. Al menos eso me han dicho algunos directivos de la secretaria que en vivo y personalmente me han dicho que no pueden hablar.

Al respecto, el Lic. Gutiérrez afirma que “lo que no se puede ni debe hacer desde el punto de vista legal ni ético es hacer afirmaciones que no corresponden a la verdad pues en ese caso constituyen una calumnia o bien sugieren suspicacias acerca de la objetividad y el rigor profesional del columnista“. Tttttsssss, eso ya calienta.

No sé si el lic. me esté amenazando “desde el punto de vista legal” (no lo creo) o esté cuestionando mi ética pero yo siempre he cuidado en NO HACER AFIRMACIONES pues tengo muy claro que LA VERDAD ES SUBJETIVA y que en un mismo asunto podemos encontrarnos con varias verdades. Esa es una enseñanza Mariniana y una mística de MILENIO, nadie es dueño de la verdad absoluta y mucho menos los periodistas. Por eso siempre cuido de NO DECIR MENTIRAS pues me arriesgo a ser demandado por calumnioso y en el caso de la licitación en comento, solamente dije que hay quienes se quejan del fallo pues “únicamente buscaron pretextos para descalificar a las otras siete, de que se trata de la oferta más cara, y de que el ganador rebasó por mucho el techo financiero (80 por ciento) y que según la Ley de Adquisiciones debió haber sido descalificado”. No estoy diciendo una mentira, me consta que hay quienes se quejan pero de que lo hagan por la vía institucional eso sí, no lo sé.

Además si el Lic. Gutiérrez tiene suspicacias sobre mi objetividad y rigor profesional, le puedo decir que se trata de un serio debate que ni las universidades han podido resolver. Un texto de OPINIÓN NUNCA PUEDE SER OBJETIVO, se trata de un punto de vista (tal vez equivocado) de una persona y por tanto la OPINIÓN SIEMPRE SERA SUBJETIVA. Ahora, bien, si lo que quiso decir el Lic. Gutiérrez es que me faltó imparcialidad y rigor periodístico, esa sí se la compro (a medias) y le pido de manera respetuosa y sincera que me ayude a subsanar ese inconveniente; modificando los métodos, tiempos y vías para la comunicación social de la SEP, a fin de hacerlos más expeditos, abiertos y precisos. ¿Será posible? ¿o ya no tiene caso?

En el último punto, el Lic. afirma que “tal como lo marca la ley, prevalece el derecho de los Licitantes a presentar cualquier objeción o inconformidad al respecto y ….” un largo bla-bla-bla que te invito a leer en la CARTA.

Al respecto, me sumo a la invitación que hace el Lic. Gutiérrez y hago un llamado a Mis Amigos Chismosos (MACH) para que presenten sus denuncias ante las instancias correspondientes pues como no soy suicida y mucho menos Batman, Ironman o el Capitán América, cierro mi faceta de sabueso milenario en licitaciones de tecnologías de la información en la SEP, esperando que alguien tenga los (huevos) arrestos de denunciar formalmente lo que tanto me chillan.

Sin embargo, me reservo mi derecho de seguir escribiendo en este espacio cibernético de Tecnoempresa, todas las denuncias, quejas y suspicacias que me llegan de cierto funcionario que presuntamente decide y reparte licitaciones de tecnología en la SEP y de ese personaje cercano que, según me cuentan MACH; es quien teje la red de favores en esa dependencia y de quien sigo esperando la prometida cita para poder hablar (al chile) con él.

Disculpa tanto rollo del cual, obviamente, se publicará una parte mañana en MILENIO

Sigamos pa´lante que la vida sigue

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