Establece Gobierno de AMLO 2 Salarios Mínimos en el País

 El gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador incremento el salario mínimo y estableció dos de estos indicadores económicos con el objetivo de reactivar la economía y sobre todo el mercado interno.

De esta manera, los ingresos bases quedan de la siguiente manera: A partir de primero de enero entrante el salario sube de 88.36 a 102.68 y en la frontera norte se duplica y queda en 176.72 pesos diarios.

Se trata, a nivel nacional, de un aumento del 16.21 por ciento, mientras que en los municipios que conforman la zona fronteriza, el salario mínimo vigente en 2018 se duplicará.

La secretaría del Trabajo y Previsión Social, Luisa Alcalde, dijo que desde hace tres décadas la política laboral ha sido la precarización del trabajo y la contención del salario mínimo. Estas medidas produjeron efectos económicos y sociales adversos que se vieron reflejados sobre todo en los bolsillos de los trabajadores que perciben menores ingresos:

• A partir de 1976, año en que se registró su pico más alto, el salario mínimo ha seguido una pauta descendiente hasta perder más del 70% de su poder adquisitivo al día de hoy.
• Si a inicios de los ochenta con un salario mínimo se podían comprar 51 kilos de tortilla, para inicios de la década actual solo podían comprarse 5 kilos. En aquellos años alcanzaba para ocho kilos y medio de huevos; en la presente década solo alcanza para 1.7. De poder adquirir 18.67 litros de leche, ahora con un salario mínimo solo se pueden comprar 4.6 litros.
• Los trabajadores que en la actualidad reciben un salario mínimo tendrían que laborar tres jornadas más que un trabajador de la década de los setenta para mantener el mismo nivel de vida.
• De hecho, al aumento en productividad que se registró en las últimas décadas no le correspondió un aumento del salario mínimo. Por el contrario, discurrieron por trayectorias inversas: aunque la productividad incrementó durante las últimas décadas, el ingreso de los trabajadores continuó disminuyendo. Esto quiere decir que los beneficios del aumento en productividad se concentraron en otros factores de la producción o estratos laborales.

Destacó que el reto durante el presente sexenio es pasar de un salario mínimo a un salario digno que garantice un piso de bienestar para todas las familias mexicanas.

“Con la nueva política de recuperación del salario mínimo se comienza a saldar una deuda histórica con los trabajadores de menores ingresos. Además, gracias a ello incrementará el consumo y se dinamizará el mercado interno, lo cual favorecerá el crecimiento de negocios y empresas”, indicó.

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