Licitación desierta en CNDH e IPICYT a chambear, la columna de @hugogonzalez1
octubre 1, 2020Debo confesar que soy muy sensible a distintos asuntos que conozco y por lo mismo me deprimo constantemente, me emociono fácilmente y me encabrono muy seguido; por eso, a veces me entra la decidia o el desánimo porque nomás veo que mucha gente sigue nadando en el mar de la corrupción y la impunidad mientras que este rollero solo grita en el desierto.
Sin embargo, en estos momentos me siento un poco fortalecido y renovado; no solamente porque se avanzó un poco en la lucha en contra de los corruptos que han gobernado en este país, sino porque me voy enterando que algunas de las transas que denuncié en este espacio y en el diario ContraRéplica surtieron efecto y parece que se van a enderezar varios concursos de licitación relacionados con la compra de servicios de tecnología.
El pasado 16 de septiembre, mientras tu estabas enpachado de pozole y tequila, en el periódico ContraRéplica y aquí mismo publiqué una denuncia sobre la posibilidad de que la dirección de adquisiciones de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) pudiera estar haciendo todo lo posible para que la licitación para contratar servicios de telecomunicaciones fuera ganada por una mezcla de intereses chinos, regios y marcianos.
Te dije que la primera convocatoria se declaró desierta pues los tres únicos interesados, TotalPlay, Telmex y Operbes; no cumplieron los requisitos técnicos como el hecho de incluir tecnología china. Días después se abrieron las propuestas de la segunda convocatoria pero con la novedad de que ahora se sumó un operador regio que tiene gusto por los marcianos y que sí incluyó tecnología china.
La novedad es que este viernes 2 de octubre (no se olvidará) nuevamente se declararía desierta la licitación porque al parecer, el nuevo ofertante, al sentirse ganador; presentó una oferta excesivamente elevada pues si el contrato por 60 meses estaba valuado entre 140 y 200 millones de pesos, la propuesta marciana estaba alrededor de 240 millones de pesos.
Dicen Mis Amigos Chismosos que esta decisión de no dar chance al abuso o la transa se debe a que en la CNDH ya se sienten vigilados por este y otros choreros, lo cual es un caso de éxito. Se puede ser puercos pero no trompudos.
IPICYT, a chambearle, se acabó la ubre (chichi)
Hace unas semanas te informé que el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) estaba pensando en licitar su Servicio de Infraestructura Física y Lógica de Migración de la Nube, con un contrato que rondaría entre 350 y 400 millones de pesos. Te dije que la unidad de adquisiciones del IMSS que quería “echarle la mano” al Instituto Potosino de Investigación Científica y Tecnológica (IPICYT) dándole el contrato con el cual, de paso; le ayudaría a resolver su precaria situación económica.
El favor para el IPICYT vendría de la mano de un grupo de pseudo empresarios poco ortodoxos y opacos quienes se ofrecen “desinteresadamente” para llavar soluciones de tecnología a las dependencias con las cuales tienen “contactos”. Unos les dicen gestores, otros les llaman intermediarios, otros coyotes y unos más los conocen como extorsionadores porque se asumen como los únicos con posibilidad de ganar licitaciones.
No me consta, pero hay gente que asegura que una empresa llamada ADS está operando para que el IPICYT gané ese contrato con el IMSS pues el director de dicha empresa sabe cómo ganar contratos aun sin tener la capacidad operativa para ofrecer el servicio pues se presume que así ganó varios contratos cuando estuvo en el Infotec, una dependencia muy similar al IPICYT.
Me dicen Mis Amigos Chismosos que, al parecer; esta posibilidad de darle el contrato al IPICYT se está diluyendo una vez que el Congreso de la Unión autorizó la eliminación de los Fideicomisos en el Gobierno Federal, con lo cual el IPICYT ya no tendría posibilidades de esconder recursos y mucho menos habría mecanismos para desviar dinero que les permita gestionar el pago de cualquier moche, gestión o servicio de intermediación.
Por ello, al parecer los directivos del IPICYT tendrán que buscar, ahora sí; estrategias que le permitan generar negocios propios. Se acabó la ubre