Airbnb gana juicio en Europa; no tendrá que afrontar obligaciones de un agente inmobiliario

diciembre 19, 2019 Desactivado Por Redacción Tecnoempresa

Foto: Cortesía de Airbnb

Airbnb tiene una buena razón para concluir el año con optimismo, porque acaba de concluir un litigio en Europa que le ayudará a llevar a cabo sus operaciones con mayor soltura fiscal dentro del “Viejo Continente”; los servicios de la aplicación podrían ser más rentables tanto para la empresa como las personas que utilizan la plataforma.

El Tribunal Superior de Justicia de la Unión Europea (TSJUE) determinó que Airbnb de ninguna manera puede considerarse un “agente inmobiliario”; tanto puede sortear ciertas responsabilidades ligadas a esta figura jurídica debido a que la autoridad europea consideró a la plataforma de alojamientos como un “servicio de la sociedad de la información”.

El litigio en contra de los capitaneados por Brian Chesky fue entablado por Ahtop, un lobby hotelero de capital francés que argumento que la plataforma de alojamiento no era un intermediario entre el ofertante de habitaciones y el huésped; debía apegarse a la legislación en materia.

El juicio en primera instancia fue interpuesto tres años atrás ante las autoridades francesas, mismas que en 2018 sentenciaron a Ahtop a pagar cinco mil euros por concepto de gastos del litigio a favor de Airbnb; el lobby hotelero recurrió al TSJUE para buscar una resolución jurídica que apoyara sus intereses.

Sin embargo, la máxima autoridad jurídica de la Unión Europea determinó que la plataforma de hospedaje es parte de un servicio de la sociedad de la información, en consecuencia, no se puede catalogar como un agente inmobiliario como presumía Ahtop; su negocio es meramente el ser un intermediario entre los principales actores de estos servicios.

Uno de los argumentos de Airbnb durante el pleito legal fue que son los dueños de las habitaciones los que se encargan de poner los precios por noche; ellos se limitan poner en contacto a los involucrados no como en otras plataformas donde la empresa tecnológica se encarga de poner las tarifas de los servicio. Por otra parte, la aplicación de alojamiento presta su intermediación en toda Europa vía su filial asentada en Irlanda, país que se distingue por su laxitud fiscal para atraer inversiones extranjeras.

 

GAEL

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