Norteamérica esta quitando mercado a fabricantes de Asia: Kearney

La consultora de estrategia y operaciones Kearney publicó su 11º Índice de Reshoring anual, un barómetro que rastrea el grado en que EE.UU. está reubicando la fabricación después de décadas de deslocalización.

El Índice muestra que los esfuerzos de producción industrial reubicados a EE. UU., Canadá y México continúan quitando participación de mercado a los fabricantes asiáticos, incluyendo a China. Las importaciones de EE. UU. desde los 14 países asiáticos de bajo costo disminuyeron de $1,022 mil millones en 2022 a $878 mil millones en 2023, mientras que la producción bruta manufacturera nacional (MGO) se mantuvo prácticamente estable.

El informe de este año, “Hecho en América: ¿Llegó para quedarse?”, se centra principalmente en flujos de importación y exportación entre EE.UU. y los 14 países asiáticos de bajo costo, incluyendo a China, así como tendencias de importación de productos manufacturados en Canadá y México.

El Índice de Reshoring 2024 de Kearney, encuentra un mercado estadounidense que importa cada vez más bienes fabricados en geografías cercanas al mercado doméstico y menos bienes de los 14 países asiáticos, continuando las tendencias que se han puesto en marcha durante los últimos años.

“El slogan “Hecho en América, para América” describe el futuro previsible de la fabricación industrial en el hemisferio occidental”, señaló Patrick Van den Bossche, socio y autor principal del informe anual del Índice de Reshoring.

“Sin embargo, eso no significa que China y otras naciones productoras se queden de brazos cruzados mientras cada vez más bienes reubicados fluyen hacia el mercado estadounidense. Nuestra investigación muestra una correlación emergente entre el aumento de las importaciones estadounidenses desde los 14 países asiáticos de bajo costo, con exclusión de China, y el aumento de las importaciones que estos países ven desde este país, que ahora está generando superávits comerciales con Vietnam, India y Tailandia, que a su vez están generando superávits crecientes con EE. UU.”

Si bien la mayoría de la caída en las importaciones de los asiáticos de bajo costo fue causada por una reducción del 20% en las importaciones chinas, por primera vez desde el primer Índice de Reshoring de 2013, algunos países asiáticos (excluyendo a China), incluidos Vietnam y Malasia, también vieron una disminución en las importaciones.

El informe encontró que las importaciones de Canadá han aumentado constantemente desde la pandemia, manteniendo una tasa de crecimiento similar a la de los asiáticos de bajo costo. Las tendencias al sur de la frontera detalladas en el informe de Kearney de 2023 también continuaron y se ampliaron en el nuevo Índice. El año pasado, por primera vez desde 2013, México superó a China como el mayor exportador a EE. UU. Los bienes fabricados en México importados a EE. UU. crecieron un 32%, de $320 mil millones a $422 mil millones de dólares, desde el período pre-COVID.

“Las inversiones de EE. UU. en reshoring se mantienen sólidas, pero a pesar de recibir un apoyo considerable tanto del sector privado como del público, la fabricación nacional todavía enfrenta obstáculos considerables, incluida la falta de trabajadores calificados, los costos laborales y los desafíos de infraestructura”, señaló Omar Troncoso, socio de la práctica de consumo y retail de Kearney México y coautor del Índice. “Nuestra investigación, sin embargo, muestra que la gran mayoría de los líderes que buscan acercar sus operaciones de fabricación al mercado interno están considerando a EE. UU. El Índice de Reshoring de este año señala un fuerte interés continuo por parte de los CEOs en actividades de reubicación y relocalización cercanas, subrayando lo que ahora parece ser un cambio decisivo en las operaciones comerciales estratégicas hacia la fabricación de productos más cerca del mercado interno de EE. UU. Además, la creciente presencia de China en México es un testimonio de la intención de China de seguir siendo un elemento fijo en el panorama de importaciones de EE. UU.”

Patrick Van den Bossche agregó: “dicho esto, las empresas y los consumidores estadounidenses están comenzando a comprar realmente ‘productos internos’, como muestra nuestro índice de autosuficiencia estadounidense (SSI por sus siglas en inglés), que rastrea lo que se produce en los Estados Unidos para el mercado interno y se compara con lo que se importa y se queda en el país”. El SSI disminuyó gradualmente desde 2013 hasta 2020, pero comenzó a invertirse modestamente en 2021 y aumentó un 5% entre 2022 y 2023.

La tendencia de fabricar bienes para el mercado estadounidense más cerca de dicho mercado está ahora bien establecida y existe un fuerte interés continuo por parte de los CEOs y los stakeholders (partes interesadas) en las actividades de reubicación, lo que subraya lo que parece ser un cambio decisivo en las operaciones comerciales estratégicas hacia la repatriación de la fabricación a Estados Unidos y sus geografías cercanas.

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