Un estudio de Kerry, empresa mundial de Taste & Nutrition descubrió que los fabricantes de alimentos podían reducir el consumo de azúcar en sus productos en un 30%; a fin de mantener una declaración de sabor natural utilizando Tastesense Sweet en la dosis recomendada.
Desde el punto de vista de la sustentabilidad, los beneficios de la reducción del uso del azúcar equivalen a una reducción del 30% tanto del uso de agua como de calorías; y una reducción del 20% de las emisiones de carbono.
Los resultados de la evaluación del ciclo de vida (LCA por sus siglas en inglés) se realizan para cuantificar los beneficios ambientales, nutricionales y de costos de la solución Tastesense Sweet de Kerry.
El informe, “Sabor innovador para una vida y un planeta mejores”, también analiza el ejemplo de una posible reducción del azúcar en una bebida de cola en la Unión Europea. Según Euromonitor, los consumidores compraron 21.049 millones de litros de bebida de cola con sabor a azúcar en 2020 en América Latina.
El análisis del LCA determinó que si se aplica Tastesense Sweet para reducir el contenido de azúcar de todos estos productos en un 30%; el ahorro y los beneficios solo en Latinoamérica serían enormes.
En este análisis de un solo producto, equivaldría a eliminar 142 mil millones de cucharaditas de azúcar, reducir la ingesta de calorías; equivalente a 3.6 billones de horas de bicicleta (quema de calorías), retirar 32 mil 946 coches de la carretera; durante un año completo (emisiones de carbono) y reducir el uso de agua en 30 millones de duchas anuales.
Alejandra Rullán, Directora de Nutrición, Sustentabilidad y Asuntos Regulatorios para LATAM en Kerry; comentó que “en todo el mundo, la reducción del azúcar es uno de los principales objetivos de los responsables de las políticas gubernamentales; y de los productores de alimentos y bebidas; por no hablar de los consumidores que buscan mejorar su salud en general y prepararse mejor para afrontar el COVID-19″.
Aparte de los importantes problemas de salud que plantea el consumo excesivo de azúcar; la producción de azúcar tiene un gran costo ambiental en términos de uso de agua y emisiones de carbono. Por lo tanto, reducir el consumo de azúcar tiene importantes beneficios para la salud y el medio ambiente.
“Nuestro Kerry Tastesense Sweet permite reducir el azúcar hasta en un 30% y mantener una sensación de sabor natural a la vez que ofrece excelentes propiedades de dulzor; una sensación en boca atractiva y un efecto limpio y persistente sin notas desagradables ”; agregó Rullán.
Muchos consumidores desconocen que el procesamiento del azúcar también tiene un impacto ambiental negativo. La caña de azúcar representa casi el 80% de la producción mundial de azúcar; y más de 100 países producen actualmente el producto a partir de la caña o la remolacha. Cada año se fabrican y consumen más de 170 millones de toneladas, con importantes efectos negativos sobre el planeta derivados de los procesos de cultivo, recolección, refinado y distribución.
El LCA de Tastesense descubrió que se necesitan mil 110 litros de agua para producir un kilogramo de azúcar de caña; y 640 litros en el caso del azúcar de remolacha. Desde el punto de vista del cambio climático, un kilogramo de azúcar de caña refinado provoca emisiones de 0,42 kg de CO2e; mientras que el azúcar de remolacha emite el doble (0,85 kg de CO2e).
La reducción del azúcar no sólo tiene sentido para la salud, sino que también es más saludable para el medio ambiente y para la diferenciación de la marca. La reducción agresiva del azúcar, en definitiva, es una valiosa estrategia de desarrollo de productos para las empresas de alimentación y bebidas de todo el mundo.
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