Un análisis de NielsenIQ indicó que los millennials sostienen actualmente el gasto en México y que, para 2030, la generación Z será la principal impulsora del consumo en los mercados.
Los baby boomers, que representan el 11.2% de la población, mostraron un comportamiento de consumo cauteloso. Este grupo realizó compras en tiendas físicas, priorizando los clubes de precio y las farmacias. Además, enfocó su gasto en productos para el hogar e incluyó bebidas alcohólicas en su despensa.
La generación X, con el 18.7% de la población, mostró preocupación por la economía y mantuvo lealtad a sus marcas habituales. Este grupo prefirió autoservicios y clubes de precio con membresías. Cuando recurrió a compras electrónicas, lo hizo principalmente por la conveniencia de entrega a domicilio. Su consumo principal incluyó productos para el hogar, farmacias y alimentos para mascotas.
Los millennials, que representan el 23.6% de la población, favorecieron las compras en línea y acudieron a tiendas físicas cuando estas estuvieron cerca de sus hogares o lugares de trabajo. Se mantuvieron leales a sus marcas preferidas y buscaron innovaciones en productos. Su gasto se enfocó en cuidado personal y productos para bebé. Además, este grupo destacó como nativo digital, utilizando teléfonos móviles para realizar compras.
Los centennials, con el 27.3% de la población, mostraron conciencia ambiental y un enfoque en el cuidado personal. Buscaron marcas que compartieran sus valores y prefirieron hard discounters, atraídos por precios bajos y disponibilidad inmediata. Su consumo principal incluyó productos de higiene, belleza y golosinas. También utilizaron teléfonos móviles para comprar en línea y comparar precios en tiendas físicas.
México se presentó como un país con una población mayoritariamente joven, ya que el 65% de los habitantes tienen menos de 40 años. Los millennials y centennials, que representan el 50% de la población, han mostrado capacidad de recuperación económica. El informe señaló que 30% de los millennials y 37% de la generación Z lograron restablecer sus finanzas tras pérdidas de empleo o ingresos.
Las principales preocupaciones de los consumidores fueron el aumento de precios de alimentos (33%) y la capacidad de proveer para sus familias (19%). Los millennials manifestaron mayor preocupación por el incremento en los costos de servicios, mientras que los centennials enfocaron su inquietud en el calentamiento global y la capacidad de generar ingresos.
Los hábitos de compra cambiaron debido a estos factores. Millennials y centennials recurrieron a la tecnología para mejorar sus decisiones de compra, utilizando plataformas digitales y teléfonos móviles. Mientras los baby boomers optaron por productos premium, los millennials y centennials realizaron compras más frecuentes con menor gasto individual, favoreciendo canales como hard discounters y comercio electrónico.
El análisis señaló diferencias en la forma en que cada grupo buscó información sobre productos. Los millennials revisaron reseñas en línea, mientras que los centennials basaron sus decisiones en recomendaciones de influencers.
Raquel Jiménez, líder de Customer Success en NielsenIQ México, indicó que el consumo generacional en México refleja cambios económicos, sociales y tecnológicos. Explicó que las empresas deberán adaptarse a la era digital y responder a las necesidades de estas generaciones con soluciones innovadoras y precios competitivos.