Recuerda que a finales de 2017 se declaró desierta la licitación de ese contrato que motivó la inconformidad de Mota-Engil, pues se veía ganadora al considerar que su propuesta cumplía los requisitos técnicos y su oferta era la más baja. No fue así y el caso llegó a la SFP, lo que sirvió para que el Grupo Aeroportuario de Ciudad de México se viera obligado a publicar una segunda licitación con un presupuesto límite de 3 mil 876.5 millones de pesos.
Sin embargo, Mis Amigos Chismosos me dicen que no se sabe si Mota-Engil podría cumplir (en caso de ganar) ese contrato en tiempo y forma, pues de los 13 grandes proyectos de infraestructura pública que ha obtenido en el sexenio, 10 de ellos se realizan con retrasos que pueden alcanzar hasta tres años.
Me informan de rezagos emblemáticos como el del Eje Metropolitano Siervo de la Nación, al nororiente del Valle de México, que se debió entregar en octubre de 2016 pero sigue en construcción, y se estima que operará hasta marzo de 2019. La inversión en esta concesión (sin recursos presupuestales) pasó de 4 mil 550 millones de pesos contratados hasta casi 6 mil 300 millones, o sea, 38 por ciento más.
En cuanto a obra pública contratada con recursos presupuestales también tiene incumplimientos, como el Hospital General de Tlalnepantla Valle Ceylan, con 20 meses de retraso, así como los 15 meses de rezago en Viaducto Uno, en la ampliación del Tren Eléctrico de Guadalajara (Línea 3).
Con ese historial de rezagos, que se convierte casi en una constante latinoamericana, pues en Paraguay y Perú la firma portuguesa tiene problemas similares, me hace pensar que en lugar de perder el tiempo litigando la firma de un contrato no ganado, mejor que cumpla con las obras que tiene inconclusas y, con ello, hablar con el ejemplo.
Tic tac
Leticia Salas Torres, directora general de Comunicación Social y Difusión del INAI, me informa que en la licitación para la contratación de tarjetas para el comedor del INAI participaron Sodexo, Suven y Toka, a las que se les pidió que la mica “debe contar con un chip de seguridad”.
Dice que solo Toka y Suven cumplieron con los requisitos técnicos y que ganó la segunda al ser la propuesta más baja, pero que todavía es vigente el plazo para la entrega de las tarjetas; “sin embargo, en caso de que Suven no cumpla con los requisitos, el INAI iniciará el procedimiento correspondiente”. El plazo vence hoy.