
Caída de PIB -0.6% y Tipo de Cambio de 21.70 a Finales de 2025 por Aranceles, Banamex
marzo 4, 2025Los aranceles generalizados de 25% de Estados Unidos a las importaciones de México y Canadá que entraron en vigor hoy, así como 20% a producto chinos parece desatar guerras comerciales que podrían golpear el crecimiento económico y elevar los precios para los estadounidenses.
De acuerdo con un análisis de Banamex, en un escenario en el cual duraran entre 3 y 4 meses, las consecuencias serían relativamente limitadas sobre las exportaciones y la actividad en México.
Estimamos que el PIB caería 0.6% en 2025, el tipo de cambio terminaría el año en 21.70 pesos por dólar, la inflación se ajustaría ligeramente al alza, a 3.9%, y la tasa de interés objetivo llegaría a 7.75% en diciembre.
Escenarios alternativos ante las dudas respecto a la duración de los aranceles, la implementación a otros países y la respuesta de México. Elaboramos un escenario ‘moderadamente negativo’, al que podríamos pasar a principios de abril, en caso de que se mantengan los aranceles de 25% a México, además de que se agreguen adicionales al resto del mundo y/o a ciertos sectores, en línea con los anuncios de Trump.

Estimamos que, llegado ese caso, lo más probable sería que los aranceles no durarían mucho tiempo más dados los efectos contraproducentes para la economía americana.
De acuerdo con el estudio de Banamex, el escenario ‘negativo’ es que los aranceles de 25% duren un año. En ese caso proyectamos que el PIB caería 2.4% en 2025, pues a los efectos directos de los aranceles se añadiría el impacto negativo de un sentimiento creciente en el mercado, aunque aún limitado, de que deben desecharse muchas inversiones (nacionales y extranjeras) ligadas a la exportación hacia EUA, y que la posible desaparición del TMEC eliminaría un ‘candado institucional’ en el país.
La depreciación sería mayor, con un nivel de 23.40 pesos por dólar en diciembre, la inflación en 4.5% y la tasa de interés objetivo en 8.25%.
No elaboramos sobre el ‘peor escenario’, que consistiría en que inversionistas y mercados se convencieran de que el TMEC desaparecerá permanentemente y de que los aranceles de 25% se mantendrían, pues consideramos muy poco probable que se materialice, aunque ya no es inconcebible.
El presidente estadounidense declaró que los tres países no habían hecho lo suficiente para detener el flujo de fentanilo a Estados Unidos como el argumento para la implementación de los aranceles.
Si bien los analistas también se plantean el escenario de que estas medidas tengan una vigencia de corta duración (hasta un mes) dado que en ese tiempo habrá ya presiones internas importantes, y Trump ya habría reforzado la credibilidad de sus amenazas, el hecho de que hayan entrado en vigor aumenta la incertidumbre para México.
Aunado a lo anterior, la inercia de la actividad productiva al cierre de 2024 (de ligeramente mayor debilidad que la estimada) sugiere efectos de la misma incertidumbre un poco mayores que los previstos previamente.
Vale la pena destacar que dicho escenario considera que una parte de exportaciones a EUA (de bienes no perecederos, sobre todo) se frenaría por unos días, considerando que las empresas pueden aprovechar sus inventarios – los importadores de EUA se cubrieron ante la posibilidad de los aranceles, llevando a las importaciones de enero por arriba de lo esperado y del promedio histórico – lo que se compensaría una vez que se eliminen los aranceles.
Habrá represalias arancelarias.
Después de que los aranceles estadounidenses entraron en vigor a la medianoche, China y Canadá inmediatamente impusieron medidas de represalia. Por su parte, la presidenta de México señaló que anunciaría su respuesta el domingo, y que sostendrá una plática con Trump en próximos días, probablemente el jueves.
Consideramos que el gobierno de México aún vislumbra la posibilidad de un acuerdo con Trump para revertir los aranceles con un esfuerzo adicional a las concesiones ya realizadas.
Aunque económicamente sería perjudicial imponer aranceles en represalia hacia EUA, por el efecto en la actividad y precios en México, políticamente tiene sentido para afectar la producción en EUA y buscar así que la presión al interior de ese país logre que los aranceles impuestos a México no sean de mayor duración.
La economía mexicana tiene una dependencia significativa de la de EUA, donde 40% de las importaciones mexicanas provienen de EUA, 84% de las exportaciones van a EUA, y el comercio con todo el mundo representa 80% del PIB mexicano.
La respuesta de México de imponer aranceles a las importaciones que vienen de EUA afectaría al consumo y la inversión mexicanos, y presionaría al alza los precios de los bienes afectados con los aranceles, lo que implica costos por esas represalias. Por ello estimamos que la respuesta mexicana no sería equivalente, y nuestro escenario base actualizado considera que se impondrían aranceles de hasta 12.5% a las importaciones de EUA hacia México.