Los nueve ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, que asumirá el cargo el primero de septiembre próximo, sufrirán un severo recorte a sus ingresos mensuales, que son de aproximadamente 700 mil pesos, cuando la presidenta de México Claudia Sheinbaum obtienen un salario de 195 mil pesos.
Esta mañana la jefa del ejecutivo declaró que “ya viene la nueva Corte, ya no van a ganar tanto, ya van a ganar menos que la Presidenta. No pueden ganar más que la Presidenta, eso ya lo dice claramente la Constitución”.
El ministro presidente electo de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Hugo Aguilar Ortiz, acudió a la Cámara de Diputado al foro “México pluricultural: Avances y retos en los derechos de los pueblos indígenas”, en donde declaró que propondrá una disminución de los salarios en el Máximo Tribunal del país.
Ante el coordinador de Morena, Ricardo Monreal, el presidente de la Mesa Directiva, Sergio Gutiérrez Luna, y legisladores morenistas, Aguilar Ortíz expuso:
“Estamos haciendo la revisión del funcionamiento de la Corte, su presupuesto, y vamos a hacer algunos ajustes, o a proponer algunos ajustes, porque como saben, quién va a tomar la decisión va a ser el órgano de administración judicial, pero hemos revisado y todavía falta ajustar salarios, vamos a ir a la baja”, expresó el ministro.
Aseguró que seguirá con la política de austeridad del actual gobierno mediante la “reorientación de recursos, no va a implicar gastos mayores, vamos a salir con el presupuesto, el proyecto de presupuesto que tienen ahora tiene un incremento del 8%, poco más arriba de la inflación”.
Por otro lado, el Aguilar Ortiz, expresó a los legisladores que no representa a ningún partido político ni grupo de interés, por lo que no admitirá presiones de nadie en las resoluciones del máximo tribunal del país.
Adelantó que a partir de septiembre actuará en favor de todos los sectores, con absoluta libertad, con autonomía, pero sin aislamiento ni confrontaciones con nadie, ese será el nuevo rostro de la Corte, aseveró.
“No tengo carrera política, no tengo compromiso con ningún partido político, agrupación política ni con ningún sector que tenga intereses en el seno de la Corte. Yo llego por la reforma judicial, a mí me respaldan los votos que la ciudadanía me dio. A esta fecha nadie me ha presionado, nadie me ha podido decir o callar algo ha condicionado en mi labor en la Corte, llego con entera libertad, con plena autonomía”.