Antuan Harfuch reinventa la alta cocina en Polanco con Anónimo Cocina

Una fachada sobria, interiores bañados en luz natural y el aroma de ingredientes que cruzan fronteras: así se presenta Anónimo Cocina, el más reciente proyecto del empresario Antuan Harfuch Velasco, que busca redefinir la experiencia gastronómica en Polanco.

Con una visión que entrelaza diseño, cocina y hospitalidad, Harfuch apuesta por un espacio donde el detalle no se limita al plato. La propuesta combina sabores internacionales con raíces mexicanas, todo dentro de un ambiente arquitectónicamente cuidado, donde los materiales de Porcelanosa y un diseño envolvente invitan a quedarse más tiempo del previsto.

Detrás de esta nueva joya culinaria está una historia familiar: Antuan Harfuch Velasco pertenece a la cuarta generación de una dinastía dedicada a la hospitalidad. En el año 2000 fundó Grupo Harfuch, con presencia en varios sectores, pero con la esencia clara del buen servicio como hilo conductor. Anónimo Cocina es, según el propio creador, “una síntesis de todo lo aprendido y vivido”.

Uno de los elementos que ha generado mayor expectativa es su concepto tipo speakeasy: un bar oculto que complementa la experiencia del restaurante. Se trata de una fórmula poco explorada en México, que añade un componente lúdico y exclusivo al proyecto.

“El diseño es parte esencial de la experiencia. No se trata sólo de comer bien, sino de sentir, conectar, recordar”, asegura Harfuch. Y esa filosofía se percibe desde la primera impresión: una fachada discreta que contrasta con el dinamismo interior, donde cada rincón parece pensado para generar emociones.

La carta, elaborada con una curaduría que respeta la tradición sin temerle a la innovación, busca sorprender a comensales locales y visitantes internacionales. Platillos con acentos de distintos continentes dialogan con ingredientes típicos mexicanos, en una celebración de contrastes y armonías.

Con esta apertura, Polanco suma un nuevo referente gastronómico, y Anónimo Cocina se perfila como uno de los destinos obligados para quienes buscan algo más que una cena: una experiencia.

Antuan Harfuch Velasco lanza una invitación abierta a quienes deseen descubrir este espacio. “Anónimo es un lugar donde la arquitectura y la cocina se encuentran para contar una historia”, concluye. Y todo indica que esa historia apenas comienza.

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