Gobierno Francés reactiva impuesto del 3% a las ganancias de compañías tecnológicas

A pesar de la “tregua” ofrecida por Francia para aplicar el impuesto del 3% a las ganancias de las compañías tecnológicas, misma que tuvo una contraofensiva por la administración Trump, la cual respondió con aranceles especiales para productos exportados de suelo galo para su consumo en el más grande mercado a nivel internacional.

Sin embargo, esa suspensión de aplicación tributaria a las ganancias parecer haber terminado, las autoridades en materia económica de Francia aseguraron que se han enviado cartas invitación para que las empresas susceptibles a este impuesto, se sirvan a pagar los tributos derivados de la ley aprobada en julio del 2019 por el gobierno de Emmanuel Macron.

Diferentes especialistas de la industria tecnológica y comercio mundial indican que esta medida adoptada por Francia responde al ocaso de la administración Trump; ya puesta en marcha la transición hacia el nuevo gobierno de Joe Biden, el gobierno francés impulsa esta medida para renegociar las condiciones de impuestos aplicables a las empresas tecnológica, mismas que en su mayoría son de origen estadounidense.

A pesar de que otras naciones europeas legislaron para imponer una carga tributaria a las ganancias, lo cierto es que sólo Francia ha insistido en cobrar ese impuesto; otros países europeos han suspendido indeterminadamente esa disposición pues su salida podría afectar diferentes actividades económicas como el empleo en dichas regiones.

Por otra parte, la administración de Macron pretende obtener beneficios desligándose de la propia Comunidad Europea y organismos como la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) institución que promueve un impuesto único aplicable entre las naciones integrantes para las empresas tecnológicas.

No obstante, la estimación del gobierno francés implica que la recaudación de este impuesto podría sumar 400 millones de euros a las arcas públicas galas; existe un sector que está a favor de este tributo especial, porque existen compañías que generan ganancias en una región específica y se lleva esos beneficios a “paraísos fiscales” para evitar el pago de impuestos a las rentas.

GAEL

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