Heineken, agua y Canacome; la columna de @robertoah Aguilar en El Sol de México
septiembre 2, 2020El 25 de agosto, y después de 21 días, se levantaron los bloqueos del ferrocarril y de la carretera panamericana en el estado de Sonora que gobierna Claudia Pavlovich, acciones que provocaron sendas pérdidas económicas no sólo a las empresas de transportes sino a las cadenas productivas y el comercio con Estados Unidos.
Pero todo apunta a que el alivio durará muy poco porque la amenaza de que los grupos de inconformes regresen es cada vez más latente, y además la falta de acción y coordinación del gobierno federal y estatal retrasaría todavía más un potencial arreglo.
Y sino fuera suficiente un día después del levantamiento se organizó otro en Meoquí, en el estado de Chihuahua de Javier Corral donde las demandas están relacionadas con el abasto de agua, y aunque por el momento las afectaciones son para el sector automotriz y el agrícola local, crecen las amenazas contra la planta de Heineken instalada en este municipio y que es la más moderna y grande en el mundo de la cervecera holandesa en la que invirtió 7 mil millones de pesos y del total de producción 40% se exporta a Estados Unidos, y aunque no es la primera vez que grupos amenazan a la compañía y su naciente cadena de proveedores, hoy parece que el entorno es mucho más complicado.
Por la toma de vías en Sonora, la industria cervecera fue las más afectadas con más de 125 millones de pesos en pérdidas por el desabasto de insumos. Y en general para el sector ferroviario las minusvalias provocadas por las tomas de vías ya superan al robo de mercancías y además con apenas ocho meses de 2020 ya es otro año de record de bloqueos con 64 interrupciones más que en 2019. Sigue leyendo aquí
