Facebook y YouTube cerraron el paso a videos del atentado terrorista en Nueva Zelanda

marzo 18, 2019 Desactivado Por Redacción Tecnoempresa

Foto: Cortesía de Facebook y YouTube

El atentado terrorista ocurrido el pasado quince de marzo en Christchurch, Nueva Zelanda, puso a prueba los protocolos para eliminar contenido lascivo dentro de las plataformas de redes sociales y compartición de videos; tanto como Facebook como YouTube dieron de baja muchos videos que daban ilustraban el ataque perpetrado en contra de los asistentes a dos mezquitas de la localidad.

De tal manera, la red social capitaneada por Mark Zuckerberg, por medio de “Twitter” aseguró que 24 horas posteriores a la tragedia perpetuada por un “supremacista blanco”, eliminó cerca 1.5 millones de videos que ilustraban la desgracia, de los cuales 4/5 fueron bloqueados en el preciso instante en el que se trataban de subir.

YouTube por su parte informó al diario “The Washngton Post” que durante todo el fin de semana pasado, dieron de baja inumerable cantidad de videos que daban cuenta del atentado que sembró el terror dentro de la comunidad internacional, política restrictiva que fue aplicada tanto para los videos que fueron capturados por los autores materiales del tiroteo, hasta aquellos que fueron editados para que no fueran detectados a simple vista.

Sin embargo, los capitaneados por Susan Wojcicki no dieron a conocer el total de videos a los que les cerraron el paso al interior de su plataforma por incitar a malas prácticas dentro del internet, contario a Facebook que sí ofreció un dato preliminar de los  contenidos audiovisuales que fueron dados de baja de sus servicios.

Facebook además de parar en seco los videos del atentado terrorista, también eliminó la cuenta de uno de los involucrados en la tragedia; pretendieron evitar que su red social se convirtiera en un espacio de apología de la matanza o de apoyo para el supuesto asesino, debido a que ya el daño estaba hecho cuando utilizó esta “social media” para compartir en video el testimonio de sus atrocidades.

 

GAEL

30