Gobierno de México debe Proteger a Trabajadores Mineros ante Imposición de EU
mayo 31, 2018Edgar Amigón
El Sindicato Nacional de Trabajadores Mineros, que dirige Napoleón Gómez Urrutia, condenó la decisión del gobierno estadounidense de imponer aranceles contra México de 25% sobre exportaciones de acero y de 10% sobre aluminio.
Como representantes de miles de trabajadores de las industrias del acero y el aluminio, exigimos al gobierno de México que tome medidas inmediatas y efectivas para proteger a los trabajadores de estas industrias.
En un comunicado, dijo que desde hace muchos años, hemos exigido que el gobierno de México tome medidas para defender a nuestra industria del acero contra las exportaciones desleales de China, Vietnam, Brasil y otros países a precios artificialmente bajos.
Desgraciadamente, los gobiernos del PRI y el PAN, sobornados por las empresas multinacionales y comprometidos con las políticas neoliberales, nunca respondieron de manera adecuada.
Aunque el gobierno actual de México acaba de imponer algunas medidas contra el dumping de acero chino, y últimamente contra los aranceles para exportaciones mexicanas de acero y aluminio, ambas han sido muy débiles e inferiores a las promovidas por otros países y no han servido, por ejemplo, para detener la competencia desleal de China.
El Sindicato Nacional de Mineros pregunta cómo es posible que el gobierno de Estados Unidos sea capaz de proteger a su industria del acero y a sus trabajadores, y el de México no haya hecho lo equivalente con su industria y su trabajadores, sumido en las indecisiones y la debilidad, sobre todo pensando que el problema no es nuevo sino que tiene ya años de duración.
Ahora el gobierno de México tendrá que fajarse los pantalones y enfrentar la doble amenaza de Estados Unidos, China y hasta de Brasil. Esto requiere, primero, tomar medidas inmediatas para proteger la estabilidad laboral de los trabajadores en las industrias del acero y aluminio que podrán ser perjudicados por la acción de los Estados Unidos.
Concordamos con la exigencia de la Cámara Nacional de la Industria del Hierro y del Acero, CANACERO, de que es necesario “(1) evitar que México sirva como un puente de triangulación de importaciones desleales de productos de acero de terceros países a Estados Unidos como medidas espejo a las adoptadas por nuestro principal socio comercial respetando los Tratados de Libre Comercio firmados por México,” y, (2) “detener la potencial oleada de importaciones desleales que buscarán colocarse en nuestro país”.
Pero el problema es más profundo. Lamentamos que el gobierno de México no haya podido manejar con suficiente inteligencia las negociaciones con el país vecino para evitar estas consecuencias negativas para nuestras industrias y nuestros trabajadores. Al contrario, este gobierno ha defendido con capa y espada el modelo de bajos salarios y “libre comercio” que somete a los trabajadores a los intereses de los grandes empresarios, dejando a la clase obrera indefensa contra las depredaciones de las empresas y sus lacayos, los sindicatos charros.
No nos sorprende que México, después de cuatro décadas de conducta auto-destructiva, hoy en día no tenga la visión ni la capacidad para defender a sus industrias, a sus trabajadores, y su honor contra este asalto. Afortunadamente este 1 de julio tendremos la oportunidad de escoger un nuevo camino.
